
Paso 1: limpie la piel suavemente y a fondo
Limpia tu piel con agua tibia y una ducha refrescante e hidratante eliminando el cloro, el agua salada y el sudor. ¡No uses exfoliantes ahora porque la piel está irritada!
Paso 2: secar adecuadamente
Seca suavemente la piel después de bañarte y evita frotar demasiado, tanto en el cuerpo como en la cara.

Paso 3: usar después de la loción solar
Para el cuerpo: luego utiliza una loción corporal refrescante después del sol para devolver la hidratación necesaria a la piel y calmar las áreas irritadas. Si estás loca por ponerte morena, ¡usa aftersun con acelerador de bronceado!
Para la cara: la ampolla After Sun de BABOR proporciona frescura, es de rápida absorción y refrescante para la piel estresada, se debe aplicar en la cara, el cuello y el escote. Promueve la regeneración de la piel después de la exposición al sol.

Paso 4: aplicar crema otra vez
Después de cierto tiempo de exposición, vuelva a aplicar crema sobre la piel. ¡Tu piel te lo agradecerá, porque necesita una regeneración especial! Por cierto, en verano puedes integrar los productos After Sun en tu rutina como cuidado diario.
Después de tomar el sol...
Esto no debería faltar la próxima vez que tomes el sol:
- Loción de protección solar con un factor de protección solar adaptado a mi tipo de piel.
- Siempre aplicar una capa suficientemente gruesa
- Vuelve a aplicar regularmente, porque la crema, y por lo tanto la protección, se pierde a través de la ropa, el sudor, etc.
- Utiliza un sombrero o gorra cuando pasas muchas horas al sol.
- Una sombrilla en las horas centrales del día
- Gafas de sol, porque los ojos también deben protegerse del sol.